viernes, 5 de diciembre de 2014

He mudado la piel, y ya no queda ni rastro de tus marcas.









Yo también me he comido una mirada  y la he masticado como se hace con el chocolate,
 me he quedado de inquilina en un ventrículo que me hacía de despertador,
 he colgado de unas cuerdas vocales que hacían música con solo vibrar
 he llegado a un esternón y decidido plantar mi bandera.
Yo también he acariciado un cabello de león indomable,
he besado unos parpados que encerraban pupilas maravillosas
he rozado unos dedos que al tocarme hacían magia,
me he vuelto habitual en una caja torácica que convertí en hogar.
Yo también he lamido unos labios embusteros y dulces,
he vomitado unas costillas carceleras 
me he roto todos los huesos para caber en un corazón
he susurrado a unos oídos que escondían mis secreto.
Yo también me he enamorado de una catástrofe y sabido como sobrevivir a ella.



martes, 18 de noviembre de 2014


Si alguna vez tengo una hija, espero poder agarrarle de las muñecas y decirle que yo no pasé hambre en ninguna guerra; pero me enamoré de ti. 
(Irene X)





Yo viví el amor como quien vive una guerra,
me devastó por dentro,
y por fuera dejó ruinas de los bombardeos de tú cuerpo sobre mi ciudad maldita.
Viví el amor como el gran incendio de mi vida,
llamas estranguladas cerniéndose sobre nosotros dos,
cenizas que al soplarlas acababan estancadas en cualquier rincón de mi inocencia.
Yo sentí con los ojos vendados, como alguien que intenta acertar a una piñata,
sin saber que lo caerá esta vez no son caramelos si no despojos de si mismo.
Cría en el amor como una puesta,
un todo o nada,
si no podía ganar entonces tampoco merecía perderte.
Luché por él en una batalla a muerte,
y lo peor es que al final resulté vencida y viva.
Me despojé de cada centímetro de mi piel en nombre de ese amor,
acabé con todo lo que me cubría,
y me presenté desnuda y despellejada para que me apaleara a su gusto.
Nací cambiante y me moldee para encajar en la visión que parecía compartir,
alcancé la perfección para complacer a un amor inhumano y sádico,
que me rechazó mucho antes de que tuviera opción de alcanzarlo.
Viví el amor como un imposible hecho a la medida de mis expectativas,
un sentimiento sobre el que yo escupía,
mientras en secreto me moría de sed.
Si alguna vez me preguntan como te viví, diré que yo nunca quise enamorarme, pero que la guerra me estalló en las manos y que tú metralla me caló hasta los huesos, agujereándome incluso el corazón.

miércoles, 12 de noviembre de 2014


¿Y QUE HACES SI NADIE QUIERE SER SALVADO?


Los ojos no ven aquello que mi corazón no deja de sangrar. El pecho me pesa casi tanto como el resto del cuerpo. Las manos no quieren tocar nada que no seas tú, que no sea otro, ya no desean volver a tocar nada. Mis pies se niegan a correr en dirección opuesta a tu sonrisa. Todo mi ser está tan impregnado de ti que no sabe como rehacerse si no es con tu ayuda. Dime como puedo volver a ser yo misma sin tenerte a ti como calco, sin poder construirme según tus deseos.
Me he vuelto tan pequeña que me da miedo que el amor de mi vida pase por delante de mi y no sea capaz de mirarme. Ni si quiera yo soy capaz de mirarme. Me siento tan responsable de mi misma que no comprendo como tan poca autoestima y tanta autodestrucción pueden caber en las siete costillas de mi pecho, en las paredes que me encierran en un cuerpo que no me pertenece, que nunca lo ha hecho. Este envase que me tortura como una corona de espinos. Me impongo mi propia redención. Me apaleo a mi misma sin parar. A veces prefiero echarte la culpa a ti de todos los demonios que me recorren el estómago, y decido hacerte dragón en todos mis castillos, el asesino de la pequeña parte de mi que aún mantenía la cordura. Pero no puedo mentirme a mi misma, aunque lo intente, así que termino admitiendo que tú solo fuiste desencadenante de lo inevitable, artificiero en unos fuegos que por poco te explotan en el corazón, menos mal que eres inifugo a toda clase de sentimientos.
Ya no puedo ponerte como excusa de mis lagrimas d cocodrilo, ni de mis quimeras con forma de sacos de huesos, no de nuevo, no como la última vez. Tú has dejado de ser tú para convertirte en un recuerdo vergonzoso de un fracaso inexorable, como el paso del tiempo sobre tu recuerdo. Yo sin embargo sigo viva y agonizado, mirándome sobre un reflejo al que no puedo devolver la sonrisa. Incapaz de asumir que mis ojos pertenecen a esa figura que se desdibuja delante de mi, nunca más sirena. 
Ojalá comprendas que el daño que me causo no tiene que ver con tu estela.

lunes, 5 de mayo de 2014

Te he dedicado tantos días especiales que cuando realmente quiero que las mariposas vuelen a tu alrededor ya no puedo abrirme en canal, mi corazón no resistiría un minuto más sobre tus manos. Me destruyes  mimetizándote con una máquina de demolición, rompes mis paredes y dejo de ser capaz de sostenerme sin tus hombros, destrozas mis ventanas y la felicidad de los amaneceres no se ve desde mi cuerpo. Has hecho de mi algo vacío consiguiendo transformar a la chica de los hoyuelos en una muñeca de trapo, enhorabuena. No puedo imaginarme queriéndote en otro día especial, esos en los que nos despertábamos en la misma cama, como un nudo humano. Cuando tus piernas se confundían con mi alma, y las rodillas de ambos nos llegaban hasta la garganta. Las mañanas en las que antes de abrir los ojos te sentí en el pelo, acariciando mi desastre. Esos días en los que levantarse parecía un imposible y nuestros corazones tiraban de nosotros, cuando lo único que necesitaba para sobrevivir todo el día era una ración de tus manos. Mis días favoritos no se volverán a repetir, esos en los que las agujetas de la risa no querían desaparecer de mis estomago, justo como tus mariposas, sé que no paro de nombrarlas, pero eran tan bonitas que cuando fueron muriendo una a una lloré más de lo que jamás he llorado por ti, lloré un río. Mis días en el mundo eran cuando por la noche decidías jugar después de una tarde entera pensándote, un juego en el que los dos ganábamos siempre. Mis días favoritos se convertían en un muchas noches de buenos besos o viceversa, en  poesía encerrada en nuestras bocas, un nuestros ojos, un tus manos y mi pecho. Ahora sé que los días especiales no van a  volver, como tú que tampoco volverás a ser tú de nuevo.
Supongo que después de que te fueras, hoy me toca decirme a mi misma: felicidades, los días especiales se acabaron, pero la felicidad volverá en algún momento (sin ti)



martes, 29 de abril de 2014

A ti, que me dejaste de querer mientras me susurrabas palabras de amor a oído.
A ti, que te gustó el juego hasta que viste que tus faroles podía acabar fundiéndose, y por una vez dejarte a oscuras con tus propios demonios.
A ti,que me engañaste con mentiras que quise convertir en recuerdo.
A ti, que jamás te quedaste despierto para descubrir si cuando yo dormía también bailaba la luna.
A ti, que ni si quiera intentaste besarme rodeado de testigos, mirándome a los ojos, convirtiéndome en intangible.
A ti que alargaste nuestra historia, poniendo puntos suspensivos donde mi lengua indecisa escribía punto y aparte.
A ti, que te me apareces en mis mejores sueños como dueño de todos mis continentes.
A ti,que a pesar de todos, dijiste que yo era la única musa que podía inspirarte.
A ti, que te pienso en las madrugadas cuando ya no tengo fuerzas para echar a tus ojos de mi vida.
A ti, que juraste protegerme y acabaste hiriéndome de muerte.
A ti, que mis caricias nunca te supieron a lleno, y mis miradas siempre te dejaban un regusto a vacío.
A ti, que el amor que no quisiste compartir conmigo se lo reglaste a cualquiera.
A ti, que aunque no lo admitirás jamás fuiste más importante que cualquier 14 de febrero.
A ti, que te justificaste con escusas que yo usaba como escudos.
A ti, que la vida parecía tirar de ti y darme a mi un infinito que me asfixiaba.
A ti, que nuestros detalles te parecieron siempre indignos de una adoración como la mía.
A ti, que mi amor no te rozaba, pero el tuyo calaba hasta los huesos.
A ti, amor, espero no quererte nunca más...





domingo, 27 de abril de 2014

Nunca fui la chica de las fotos,
en todo caso aquellas que escondes en tu mesilla de noche,
durante mucho tiempo ser secreto me pareció precioso,
algo que nadie más era capaz de comprender,
como la magia.
Tu eras mi genio de los deseos,
y yo resumía todos mis anhelos en uno solo:
tus labios sobre mi boca.
Los años que no puedes devolverme,
se me quedan impregnados en tu ropa,
en tu falta de cariño,
en tu amor por otra.
Ahora me doy cuenta de que todo lo que hice fue por ti,
sin darme cuenta,
empezaste a ser tú mucho antes de que yo supiera quien era.
He abandonado mi vida por alguien que no sabe lo que quiere de la suya,
detenido mi felicidad a favor de entregarte a ti todas mis buenas mañanas,
ya no me queda más remedio que decirte,
que por un tiempo, que pareció infinito, yo viví de ti.
Pero ahora,
quédate con tus manos devastadoras,
no quiero volver a sentirte en la piel,
ni en el alma,
no quiero volver a sentirme en ti.
Te devuelvo las emociones que despertaste,
la ternura de las mañanas que me levantaba contigo respirándome,
el cariño que me rebosaba en las pupilas al mirarte,
la catástrofe que mi boca causaba cuando me susurrabas al oído.
Por favor llévate todo aquello que me entregaste a regañadientes,
las pocas marcas de amor que me imprimiste en los parpados,
las mentiras que quise transformar en verdades que solo yo comprendía,
todos y cada uno de los recuerdos en los que tú te conviertes en héroe.
Se me olvidaba decirte que te odio,
te odio casi tanto como sigo queriéndote.


martes, 18 de marzo de 2014

No se como hacer para olvidarte, sigues siendo recuerdo fugitivo, invitado a un desastre que has creado tú mismo.
Por favor, abandóname, la soledad me asusta mucho menos que tus miradas tristes. Ya nunca vamos a volver a ser aquello que un día nos dio tanto pánico romper.
Ha dejado de tener sentido esquivarnos, la magia no palpita detrás de nuestros ojos, la memoria nos persigue y nos tortura, haciendo recopilación con todo el maravilloso caos que nos envolvía entonces.
Sé que nunca, bajo ninguna circunstancia podré querer con las mismas balas con las que te disparé a ti, cambiará el calibre, el modelo, cambiará hasta la intención.
Serás el único al que quise asesinar, ya me dan igual los supervivientes, solo tú podías hacerme odiarte y enamorarme de cada brizna que contienes al mismo tiempo.
Me ha costado todo mi vacío perderte, ya no queda rastro de la niña que dejaba migas de pan para que fueras tu quien la encontrase. No hay vuelta atrás; ahogué a mi Peter Pan cuando saliste volando ara enredarte en otro pelo, en otras sabanas, para quedarte dormido en la comisura de otra boca. Se terminaron todos los zapatos de cristal, todas las noches descalza pisándote los pies, las madrugadas pegando mis dedos a tus rodillas para fundirme con tu piel.





No quiero jamás otro felices para siempre,eso es una mentira que solo me hubiera servido si eras tu quien la estrellaba contra mis oídos.


domingo, 23 de febrero de 2014

Atento contra el amor en cada palabra que no digo, en cada susurro que desperdicio sin regalarme a tus oídos. Soy una fugitiva que busca refugio en tu cama desesperadamente, protección bajo tus sabanas. He visto mi propia muerte reflejada en tus pupilas tantas veces que ya no le tengo miedo a nada, solo a echarte de mi vida o a echarte de menos toda la vida,  no tengo nada claro esto último. Me has vuelto un saco roto de mentiras, a mi misma, a ti, al futuro que me niego a dejar pasar delante nuestra. Porque no quiero ser terrorista con cualquier cuerpo, me parece una injusticia mutilar a otro queriendo lisiarte el corazón solo a ti.Te diría mil promesas que no puedo cumplir y tu mientras me explicarías porque bailar bajo la lluvia se convierte en un ritual mágico si eres tú quien está descalzo, no se como no me había dado cuenta antes de que solo alguien como tú puede fundir todo Madrid deslizándose por el asfalto.
Nunca te he dicho que yo entoné la marcha de tu funeral cientos de veces, que escupí sobre nuestra historia, recé por no encontrarnos esa vez primera casi sin habernos conocido. Me he quedado también sin decirte que estamos atados, nos pertenecemos sobre la piel que se recuerda la una a la otra y se reclama en un lamento que desgarra. Somos esclavos de lo que hicimos, y somos unos cobardes que guardan su castigo en secreto, como si el amor fuera algo de que lo avergonzarse. No tienes ni idea de lo que darían la mitad de desgraciados de este planeta por ser capaces de volar como yo lo hago cuando me miras, o de destruir el caos cuando me besas.
Ya casi no recuerdo lo que significa un combate en tus labios, pero sé que son de esos donde alguno de los dos muere, como todo lo interesante que contienes. Tú tienes que subir la apuesta y quebrar a tu oponente, vencer a una batalla donde los dos queríamos devorarnos.No olvidaré lo que era ser tuya sin que tú fueras mío del todo,y a ti solo me queda recordarte que aún sigue siendo imposible negarme si eres tú quien suplica.

martes, 4 de febrero de 2014

Rebañarte los vórtices se convierte en obligación,
no hacerlo es sacrilegio.
Llevo queriéndote tres vidas,
y nunca he conseguido mutilarte,
pero tu a mi me has tenido que reconstruir.
me miras y noto adoración,
te sacaría los ojos para demostrarlo,
sangrando y  enteramente mio.
Puede que los besos dejen rastro,
los tuyos dejan herida
herida y un vacío que solo se llena con mis lagrimas.
Eres impreciso y precioso,
para mi no había vida antes de tu olor.
El sexo, 
tus manos casi tan destructoras
como lo son tus palabras.
Tu boca jurándome,
odio que me mienta tan bonito y que no sepa distinguirnos.
Tú boca comiéndome,
haciendo estragos en mi.
Tú boca curándome,
eres plegaria cumplida, milagro intacto.
Solo me quedan palabras de amor para alguien como tú,
me has enseñado a vivir,
después de tu demolición,
has pintado las ventanas y levantado las paredes,
ya no me queda ningún odio incrustado,
eres querer en cualquier idioma, 
en cualquier lugar,
en cualquier vida. 

miércoles, 15 de enero de 2014

Tenía miedo de enamorarse por eso siempre veía as peliculas empezando por el final, odiaba la música y los mensajes de voz que la gente deja en los buzones. Escribía en servilletas manchadas de grasa, cantaba a todo pulmón en la ducha cuando no había nadie en casa y leía poesía camuflada con portadas de novelas de terror.

Tenía tanto miedo a perder la cabeza y dejarse arrastrar, tanto miedo de dejar de perseguirse a si misma. Ponía la excusa de que aún no se había encontrado: "la vida es una búsqueda continua preciosa" le dije en aquella barra de bar de carretera. No supe entonces que ella no es de las que se buscan para encontrarse, ella es de las que se buscan como excusa para no detenerse nunca. Porque cuando te paras corres el riesgo de ver todo lo que te rodea y entonces, entonces sí puedes descubrir lo que es verdaderamente bonito.

Hay algo contradictorio en todo esto, y no es solo que ella en sí fuera un absurdo, si no que cuanto más corría para alejarse de él ,más cerca se encontraba de no poder olvidarlo nunca. 

Creía que estaba tan rota que ya nadie podría ver inocencia en ella. Los corazones dañados dejan moratones pero ella estaba llena de sus cicatrices, con el nombre de él marcado en la piel. Nunca había visto nada igual, el dolor se le trasparentaba por debajo de la camiseta como un tatuaje que nadie deseaba ver. 

Supongo que cuando la vi entendí eso de que el amor destruye.


miércoles, 8 de enero de 2014

"Laura jamás leyó un poema y no la culpo
pero me jode que la poesía reniegue de sí misma"

http://www.medusss.blogspot.com.es

Es redundante pero Laura tiene el aura más bonita que he visto en toda mi vida,
es imposible describirla en un poema.
Tiene el color de la arena de playa, o de las tostadas recién hechas un domingo.
Un color puro que la envuelve por completo y la asfixia mientras que a mi (como al resto del mundo) nos sirve de bombona de oxígeno.
¿Cuánta bondad pueden encerrar unas manos?
Los ojos son portales del alma, y digo sin romper ninguna promesa que en los suyos se puede ver a la inocencia desnuda.