martes, 4 de febrero de 2014

Rebañarte los vórtices se convierte en obligación,
no hacerlo es sacrilegio.
Llevo queriéndote tres vidas,
y nunca he conseguido mutilarte,
pero tu a mi me has tenido que reconstruir.
me miras y noto adoración,
te sacaría los ojos para demostrarlo,
sangrando y  enteramente mio.
Puede que los besos dejen rastro,
los tuyos dejan herida
herida y un vacío que solo se llena con mis lagrimas.
Eres impreciso y precioso,
para mi no había vida antes de tu olor.
El sexo, 
tus manos casi tan destructoras
como lo son tus palabras.
Tu boca jurándome,
odio que me mienta tan bonito y que no sepa distinguirnos.
Tú boca comiéndome,
haciendo estragos en mi.
Tú boca curándome,
eres plegaria cumplida, milagro intacto.
Solo me quedan palabras de amor para alguien como tú,
me has enseñado a vivir,
después de tu demolición,
has pintado las ventanas y levantado las paredes,
ya no me queda ningún odio incrustado,
eres querer en cualquier idioma, 
en cualquier lugar,
en cualquier vida. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario